Es así, un tratamiento lifting y regenerativo, ya que mediante los hilos se logra recuperar la firmeza del óvalo facial y tensar la piel, además de conseguir una producción natural de colágeno. Es una técnica muy sencilla y prácticamente indolora: se introduce una fina cánula donde va insertado el hilo, a nivel subcutáneo, y a la hora de retirar esta cánula, el hilo queda dentro de la piel produciendo un efecto lifting evidente.
Los resultados de los hilos de sustentación suelen durar entre los 12 y 18 meses, aunque en sí, los hilos se reabsorben a los seis u ocho meses del tratamiento; esto va a depender del tipo de piel del paciente y de su predisposición genética.
En resumen, los resultados son el efecto lifting, la síntesis de colágeno y elastina, la estimulación de los fibroblastos y la microcirculación de la zona haciendo que la piel esté más oxigenada, tersa y luminosa; previene y ralentiza el proceso del envejecimiento y la flacidez.